Medicamento

Subastas de medicamentos. Lo barato, muchas veces sale caro

En los últimos meses estamos observando en la actualidad sanitaria andaluza, noticias referentes a la falta de medicamentos en las farmacias de nuestras ciudades, debido a la falta de provision de los farmacos por los laboratorios que han ganado la subast

Categorias: Actualidad Andalucía, Política y Gestión Sanitaria
Colectivos:

En los últimos meses estamos observando en la actualidad sanitaria andaluza, noticias referentes a la falta de medicamentos en las farmacias de nuestras ciudades, debido a la falta de provision de dichos farmacos por los laboratorios que han sido «agraciados» con la subasta de dichos medicamentos. En la mayor parte de los casos, estas subastas se adjudican a laboratorios cuya infraestructura es algo sospechosa y se adjudican únicamente por motivos económicos. El resultado es el que sabemos: muchas dificultades para que el paciente tome sus medicinas. Os dejamos la noticia publicada hoy en El Mundo .

El laboratorio indio Ranbaxy, al que la Junta de Andalucía ha concedido la exclusiva del suministro en las farmacias andaluzas del antihipertensivo genérico Valsartan, estará tres meses sin abastecer este fármaco, al tener problemas de con la producción.

Ranbaxy es el laboratorio al que la Agencia del Medicamento Americana le ha impuesto una multa y restricciones de entrada a Estados Unidos. En cambio, ni la Agencia Europea ni la Española han tomado medida alguna contra la firma.

La compañía remitió el pasado 4 de mayo un escrito al Servicio Andaluz de Salud (SAS) en el que informa de que, «por circunstancias sobrevenidas», no puede suministrar Valsartan hasta mediados del próximo agosto.

La subasta de fármacos del SAS obliga a las farmacias a dispensar el fármaco seleccionado por la Administración andaluza cuando el paciente lleve una receta de genéricos. Normalmente, para cada medicamento, hay dos o tres laboratorios que pueden suministrarlo, pero en el caso del antihipertensivo genérico Valsartan, tan sólo el laboratorio indio Ranbaxy puede ofrecerlo, ya que fue la única compañía que concurrió a la subasta.

Por eso, el director gerente del SAS, José Manuel Aranda, se ha visto obligado a enviar una carta a las farmacias andaluzas en la que «suspende la obligatoriedad de la dispensación» del Valsartan hasta el próximo 1 de septiembre, según recoge el escrito al que tuvo acceso EL MUNDO.

«Dado que dichos medicamentos no tienen posibilidad de sustitución, al ser los únicos seleccionados para esas formulaciones en el listado de medicamentos» de la subasta del SAS, la Administración «suspende» la obligatoriedad de dispensar el Valsartan, detalla la carta del gerente del SAS.

Fuentes de la Confederación Empresarial de Oficinas de Farmacia de Andalucía (Ceofa) dijeron a este diario que, en el caso del Valsartan, el laboratorio admite que no suministrará el fármaco, pero hay decenas de medicamentos seleccionados en las subastas del SAS que no llegan a las farmacias y las compañías no informan de nada.

De hecho, el pasado martes había setenta códigos distintos de fármacos, entre ellos el Valsartan, de los que no había existencias, como se puede ver en el documento reproducido en esta página.

El secretario general de Ceofa, Leopoldo González, indicó que, «diariamente, hay 40 o 50 faltas» de medicamentos en las farmacias andaluzas y, hasta ahora, la Junta no ha penalizado a ningún laboratorio, a pesar de que la Ley de Farmacia permite hacerlo.

«Los laboratorios que no han entrado en las subastas son los que están solucionando los desabastecimientos» provocados por las compañías elegidas por el SAS en las subastas de fármacos, explicó González. Las subastas de fármacos del SAS están recurridas en el Tribunal Constitucional.

Pese a las críticas, el SAS defiende la subasta de fármacos porque se trata de un «procedimiento transparente, competitivo y pleno de garantías» con el que se ahorra alrededor de 200 millones de euros al año.

Alegó que es la primera vez que Ranbaxy «comunica problemas de desabastecimiento» y que el tratamiento de los pacientes no se ve afectado porque este medicamento podrá ser sustituido, tal y como indica la normativa vigente, por el genérico de precio más bajo que decida el farmacéutico.

Fuente: El Mundo