32.476 facultativos residentes en España han podido acceder a la residencia en el primer año, tras haber completado los exámenes de Medicina, Psicología, Farmacia, Química, Biología o Física. 

Si finalmente se ocupasen todoas las plazas, la tendencia en el incremento de residentes se mantendría al alza, en la misma línea que las subidas de los últimos cinco ejercicios. En 2021 ya se llegaron a formalizar 30.630 puestos de residentes de primer año en el conjunto de todas las comunidades autónomas, mientras que el año anterior la cifra fue de 28.948.

Este periodo de formación es obligatorio para poder ejercer en los Servicios Públicos de Salud de España y el resto de la Unión Europea. Con los incrementos de plazas convocadas de estos años, se está en el buen camino para solucionar el problema de la falta de profesionales, pero aún hay que avanzar más, ya que las jubilaciones de los próximos años van a dejar al sistema sanitario sin profesionales y se van a necesitar más médicos, especialmente de algunas especialidades. Para ello, se necesita una planificación a medio y largo plazo y así garantizar la formación de los egresados de las facultades y la reposición de las plantillas. De nada vale formarlos, si luego no se les ofrece estabilidad y buenas condiciones laborales.

Desde el sindicato atribuyen esta falta de profesionales a los recortes salariales que han sufrido los facultativos en la última década. Después del gran esfuerzo personal de cada facultativo residente y del esfuerzo económico de la sociedad en su formación, es preocupante el creciente número de especialistas españoles que están saliendo de nuestras fronteras, buscando un puesto de trabajo digno que no encuentran hasta ahora en España.

La OMC ha expedido 4.130 certificados de idoneidad a 2.504 médicos para salir de España en 2021, datos que ponen de manifiesto la «muy precaria» situación de los profesionales y, en especial, de los más jóvenes.

Esto unido al importante número de residentes de nacionalidad distinta a la española que se forman y que muy posiblemente vuelvan a sus países de origen, puede hacer complicada la reposición de médicos. La situación actual se complicará aun más cuando se produzca la jubilación de las grandes promociones de comienzos de los años 80.

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