La “injusta” carga fiscal de las guardias médicas: Hacienda se queda con la mitad del salario.
Una vez sumadas a los ingresos que tiene el médico por su jornada ordinaria, suponen un importante incremento en las retenciones del IRPF, que se aplican al total de ingresos del facultativo.
Las retenciones fiscales que Hacienda realiza sobre el salario de los médicos supone que la administración acabe reteniendo prácticamente la mitad de lo que el facultativo percibe por una guardia médica.
Como explica a Consalud.es Vicente Matas, vocal de Atención Primaria Urbana de la OMC, el problema parte de que el sistema de IRPF es muy progresivo en España y, en el caso de los médicos, al incluir el importe anual que ganan por las guardias a su salario bruto, la retención que realiza la administración se incrementa, no sólo en la partida referente a las guardias, sino a todos los conceptos de sus ingresos.
Un informe del Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada exponía en 2014 un caso concreto, aunque con un sistema de retenciones ligeramente superior al actual. De esta forma, a un médico experimentado que percibe unos ingresos sin guardias de 55.000 euros al año, se le retiene, en concepto de IRPF, 14.900 euros. Sin embargo, al sumarle los 9.800 euros adicionales que puede ganar por hacer unas 550 horas de guardia al año, la retención final acabaría siendo de 19.300 euros, por lo que ese incremento supone el 45% de lo ingresado por las guardias.
“Hay que tener en cuenta que son horas que se hacen fuera del horario de trabajo, pero que encima se pagan por debajo de la hora de trabajo ordinaria, cuando lo normal es que las horas extras se paguen un 175% más que la hora normal”, señala Matas.
SUPERAN LA COTIZACIÓN MÁXIMA
El sistema, además, tiene otra segunda “trampa”, puesto que, habitualmente, las horas de guardia realizadas no computan como tiempo de trabajo, es decir, no se cotizan, y no tienen ninguna repercusión, por ejemplo, sobre la pensión de jubilación del médico.
La explicación a ello es que, según la base reguladora de la Seguridad Social, el médico cotizaba en 2016 un máximo de 3.642 euros al mes (en 2017 el importe se ha incrementado muy ligeramente), un importe que, según Matas, el médico ya supera sólo con su sueldo bruto, por ello, todo lo que se gana por las guardias supera ese límite y no cuenta como cotización.
Según indica el portavoz colegial en un informe del Grupo AP25 de la Organización Médica Colegial (OMC), a la hora de tributar por sus ingresos, el médico “aporta mucho (en dinero, esfuerzo horas de trabajo, etc.), y recibe menos, por su nivel de renta, para que otros, con menor nivel de renta, aportando menos reciban más (en la mayoría de las ocasiones porque necesitan más)”.
Si bien, y aún sin cuestionar el principio de “solidaridad social”, los facultativos consideran que existe un desequilibrio exagerado que afecta al médico. Por ello, para compensar esta excesiva carga fiscal, proponen, o bien aumentar las retribuciones brutas del facultativo “para que, aunque se mantengan las retenciones, al final llegue más dinero al bolsillo del médico” o bien, crear un sistema fiscal especial para los facultativos.
Fuente: ConSalud