El pasado 7 de mayo se celebró una mesa técnica para abordar la creación de nuevas categorías profesionales en el SAS: En el caso de los facultativos, se presentó la Orden de creación de la categoría de Médico/a de Urgencias y Emergencias, que incluye la creación de la plaza diferenciada de Médico/a de Urgencias y Emergencias en Equipos Móviles. También se presentaron las órdenes de creación de la plaza diferenciada de Enfermero/a de Emergencias y la categoría de Técnico de Emergencias Sanitarias. En todos los casos se trata de borradores sujetos a negociación y cuya aprobación corresponde a la mesa sectorial.

Estas nuevas categorías son necesarias para que los trabajadores de la EPES-061 puedan estatutarizarse, para lo que es necesario crear en el SAS categorías profesionales homólogas a las que actualmente ocupan en la EPES.

Tanto el SAS como los sindicatos de la mesa sectorial estamos a favor de la integración y de la estatutarización de los profesionales de la EPES. Sin embargo, el SAS debe garantizar que el proceso no perjudique ni económica ni laboralmente a estos trabajadores, que deben conservar íntegras sus retribuciones y el ámbito geográfico y funcional de sus competencias. Aunque el SAS se ha comprometido a hacerlo, no parece haber decidido aún cómo. Ambas cuestiones apenas fueron esbozadas en la referida mesa técnica.

La complejidad de la estatutarización de los profesionales de la EPES se ve incrementada porque afecta indirectamente a otros dos importantes colectivos médicos: los médicos de los Servicios de Urgencias Hospitalarias y los de los Servicios de Urgencias de Atención Primaria, es decir, los SCCU y los SUAP.

Actualmente, los Médicos de Familia de estos dos servicios pertenecen a la misma categoría profesional, dentro de la que existen dos plazas diferenciadas: la de Atención Primaria y la de Urgencias Hospitalarias. Sin embargo, hace años que existe el proyecto de crear una categoría específica para los Médicos de Urgencias Hospitalarias. De hecho, la mesa sectorial aprobó hace dos años una Orden de creación de esta categoría que, incomprensiblemente, nunca llegó a ser publicada. Ahora es necesario hacerlo para poder crear, dentro de ella, la plaza diferenciada de Médico de Emergencias que habrán de ocupar los médicos de la EPES.
El hecho de que el SAS haya descartado la Orden de creación de la categoría de Médico de Urgencia Hospitalaria ya aprobada y nos presente ahora una nueva Orden nos retrotrae a la situación de hace dos años y amenaza con complicar seriamente el proceso negociador.

Por lo que respecta a los SUAP, el SAS mantiene su posición tradicional: ignora por completo su situación y sus demandas. Actualmente hay SUAP que desarrollan funciones idénticas o muy similares a las de la EPES, resultando una parte integrante imprescindible de la atención a las Urgencias y Emergencias. El SAS se ha comprometido a equiparar a los SUAP con la EPES siempre que realicen idénticas funciones. Sin embargo, no ha precisado cómo ni cuándo lo hará. Además, mucho nos tememos que su planteamiento restrictivo pretende dejar fuera a muchos de los actuales SUAP, algo que no podremos aceptar.

En definitiva, el SAS no sabe aún de qué modo va a garantizar que los trabajadores de la EPES que se estatutaricen conserven sus retribuciones, no tiene un plan para las urgencias andaluzas que definan los respectivos ámbitos de competencias de los tres colectivos médicos implicados y no sabe de qué modo va a garantizar que los médicos que realicen las mismas funciones tengan las mismas condiciones laborales y perciban las mismas retribuciones.

La confusión reina en el SAS en todo lo relativo a este proceso, que se ve lastrado por los viejos prejuicios contra los SUAP, los grandes olvidados de la Consejería de Salud desde hace décadas, y por la incapacidad de diseñar un Plan Andaluz de Urgencias y Emergencias racional, eficiente y justo con los trabajadores. La historia de la organización de la asistencia médica de las urgencias en Andalucía es, de hecho, una historia de personalismos, desprecio a los profesionales, incompetencia, caos e improvisación.

No cometeremos la irresponsabilidad de lastrar una negociación que está en sus inicios con posicionamientos inflexibles. Sin embargo, exigimos al SAS que aclare cuanto antes sus posiciones y que garantice la indemnidad retributiva y laboral de la EPES, así como los derechos e intereses profesionales, laborales y retributivos de los Médicos de Urgencias Hospitalarias y de los SUAP. De lo contrario, será el único responsable del fracaso de este proceso negociador.

Comité Ejecutivo del SMA