Primaria arrastra el doble de recorte que los hospitales
El Ministerio de Sanidad ha hecho público el informe de Estadísticas de Gasto Sanitario Público en 2014, que muestran que atención primaria tuvo ese año 1.551 millones menos que en 2010, mientras que el recorte en especializada ha sido de sólo 865 millone
Atención Primaria ha salido de la crisis económica peor parada que los hospitales, tanto si se mira en términos absolutos como si lo que se observa es su peso sobre el conjunto del gasto sanitario. Así se desprende de las Estadísticas de Gasto Sanitario Público en 2014 que ha hecho públicas el Ministerio de Sanidad y que muestran que el gasto en atención primaria en 2014 fue de 9.045 millones de euros, 1.551 millones menos que en 2010, el primer año de fuertes recortes sanitarios.
Pese a que el gasto en atención primaria es cuatro veces menor que el de especializada, los hospitales han sufrido en términos absolutos un recorte mucho menor que el de AP.
Concretamente, en 2014 se gastaron 38.043 millones de euros en hospitales y servicios sanitarios especializados, 865 menos que en 2010. Es decir, la atención primaria ha sufrido un recorte de casi el doble que la especializada en términos absolutos, 1.551 millones en AP frente a 865 en hospitales. Porcentualmente el desequilibrio en los recortes es aún mayor, si se tiene en cuenta que el recorte entre 2010 y 2014 para hospitales fue del 2,2 por ciento mientras que en atención primaria lo fue del 14,6 por ciento.
Esto ha provocado que el peso de la atención primaria en el conjunto de la tarta de gasto sanitario público haya caído en 0,7 puntos hasta representar sólo el 14,6 por ciento, frente al 25 por ciento que reclaman las sociedades de atención primaria. Por el contrario, la atención hospitalaria y especializada ha crecido en 5,3 puntos porcentuales en la tarta y se come ya el 61,4 por ciento de todo el gasto sanitario público.
En el caso de la farmacia, el recorte ha sido también importante. En 2014 se gastaron en farmacia 10.388 millones de euros frente a los 13.406 millones del año 2010, es decir, un 22,5 por ciento menos. Esto ha provocado que el peso del gasto farmacéutico sobre el total del gasto sanitario haya caído en 2,5 puntos hasta representar sólo el 16,8 por ciento del total.
El gasto en personal cae un 11 por ciento
Por tipo de gasto, las remuneraciones del personal sanitario han sufrido una caída del 11 por ciento en el periodo 2009-2014, hasta representar el 45 por ciento de los gastos sanitarios (27.891 millones de euros sobre un total de gasto sanitario público de 61.947 millones en 2014).
Por el contrario otras partidas como los consumos intermedios (14.713 millones) están ligeramente por encima del nivel de 2010, los conciertos han caído sólo un 4,3 por ciento (desde los 7.547 millones de 2010 a los 7.220 de 2014) y representan el 11,7 por ciento de la tarta. Sí se han reducido de forma importante las transferencias corrientes (en su mayoría gasto en farmacia), que han pasado de los 14.209 millones en 2010 a los 10.994 en 2014 y los gastos de capital (intereses), que han pasado de los 2.205 millones en 2010 a los 862 millones de 2014
Menos gasto per cápita, pero mayor equidad
El gasto sanitario público por persona se situó en 1.233 euros por habitante. Este dato corresponde al gasto sanitario realizado por las autonomías, es decir, no es gasto territorializado y hay que tener en cuenta que el 7,8 por ciento del gasto sanitario total no lo realizan las autonomías, por lo que el dato, en la práctica, sería algo mayor si se tiene en cuenta el gasto correspondiente en cada autonomía a gastos sanitarios de la Administración Central, la Seguridad Social, las mutualidades de funcionarios y las corporaciones locales. Sumando todo ello, la cifra de gasto sanitario per cápita crecería hasta los 1.332 millones de euros para el conjunto del SNS, lo que representa un 10,7 por ciento menos que en 2010.
Teniendo en cuenta la distribución del gasto exclusivamente de las autonomías, las diferencias entre comunidades siguen siendo importantes, aunque se han reducido. Concretamente, la autonomía con mayor gasto sanitario por habitante sería el País Vasco, con 1.582 euros al año, 388 euros más que Baleares, que contó en 2014 con 1.194 euros por habitante. Las diferencias hasta ahora superaban los 500 euros entre autonomías.
Fuente: Diario Médico