El hospital de Jerez pierde camas y médicos en todos sus servicios.
El centro dispone de 131 camas menos que hace casi 20 años. El Sindicato Médico argumenta que esta circunstancia y el déficit de facultativos ha agravado la situación en el área de Urgencias.
La reducción del número de camas en el hospital de Jerez en los últimos años ha sido alarmante, según los datos que aporta el Sindicato Médico. En el año 1998 había 577 camas hospitalarias, en 2011 se redujeron hasta 518 y a fecha de hoy, cuenta con 460, de las que están disponibles 446, ya que el resto están cerradas. Es decir, un total de 131 camas menos que hace casi 20 años.
Esta es una de las razones – no la única- que explica la saturación ya crónica del servicio de Urgencias, y que se ha acentuado en la última semana al unirse otra serie de circunstancias. Tras una madrugada del pasado lunes caótica con 40 pacientes en Urgencias esperando cama, algunos de ellos, con tratamientos en los pasillos, la situación los días siguientes sólo se alivió ligeramente, ya que por ejemplo, el jueves los enfermos que aguardaban una cama en planta eran 24, y algunos, según este sindicato, llevaban más de 72 horas de espera. «Nos encontramos con pacientes que después de tener que esperar su turno para que se le asigne un médico, esperan además varias horas para ser atendidos por el facultativo y se dan casos que una vez atendido por éste y prescrito el tratamiento tienen que volver a esperar hasta que quede un hueco libre en la sala de tratamiento». En ocasiones -aseguran desde este sindicato- se trata de pacientes mayores de 80 años que tienen que pasar la noche en un sillón por falta de camas en Observación e incluso ser atendidos en los pasillos del servicio de Urgencias en sillas, sillones y camillas. La situación se agrava por el hecho de la falta de carros y camillas para el traslado de los enfermos.
El Sindicato Médico mantiene que, para explicar este estado de cosas, a la falta de camas hay que añadir la masificación de las consultas de los médicos de familia de los centros de salud, con las consecuentes demoras en las citas que pueden llegar hasta 7 días y asegura que también influye la masificación de las Urgencias extrahospitalarias de San Dionisio y La Granja «que están mal dotadas de personal y no disponen de la posibilidad de realizar pruebas complementarias para un correcto diagnóstico. Todo esto hace que los pacientes acudan con más frecuencia a las Urgencias del hospital para ser atendidos con una calidad asistencial adecuada». Además la pérdida del concierto del SAS con los hospitales de Villamartín y Sanlúcar está provocando que los pacientes del área de estos centros se vean obligados a acudir directamente a las Urgencias del hospital de Jerez, «lo que supone un incremento del 30% de las actuales urgencias».
El Sindicato Médico pone el acento también en las condiciones de trabajo de los médicos del servicio de Urgencias, debido a la carga asistencial que soportan. «Se encuentran estresados, con jornadas agotadoras, hasta 210 horas de trabajo al mes, lo que lleva a muchos facultativos a solicitar reducciones de jornada al no poder aguantar esta situación que ya se alarga mucho en el tiempo». Menciona también las dificultades para la contratación de facultativos por las malas condiciones que el SAS les ofrece.
El inicio de la época de alta frecuentación por la aparición de patalogías propias de estas fechas y sus complicaciones en personas mayores y pacientes crónicos es otra de las preocupaciones del personal. «Nos tememos que cuando se presenten los casos de gripe e infecciones respiratorias se agravará aún más la situación».
Por otro lado, el sindicato denuncia que está influyendo en el aumento de las urgencias el hecho de que el servicio del 061 no pueda derivar pacientes al hospital San Juan Grande, como se hacía meses atrás y asegura que por instrucciones de la gerencia del área sanitaria, el 061 tiene que llevar primero a los pacientes, en muchos casos personas mayores, a las Urgencias del hospital de Jerez, donde aguardan un tiempo considerable hasta que, según criterio facultativo, son trasladados al San Juan Grande.
La plantilla de facultativos ha diminuido en el hospital en prácticamente todos los servicios en los últimos años, según afirma el Sindicato Médico, concretando servicios como Traumatología, Cirugía, Pediatría, Otorrino, Radiología, Urgencias o Análisis Clínicos, mientras que el personal del Centro Regional de Transfusión Sanguínea, «está con contratos basura al 50%».
Paralelamente han aumentado las listas de espera de consultas externas, exploraciones y las de quirófanos. «En la actualidad llegan a cifras alarmantes», corrobora el sindicato, haciendo hincapié en la especialidad de Traumatología. Las listas de espera que publica anualmente el Servicio Andaluz de Salud (SAS) apenas son un esbozo de la realidad, teniendo en cuenta que por ejemplo en el registro de demanda de consultas externas no se contemplan las segundas consultas o revisiones. Se dan así casos como el de una persona que desde septiembre de 2015 está pendiente de un diagnóstico de Traumatología. Se trata de la queja de una paciente que fue derivada a este servicio en esa fecha desde el médico de familia, y que pasó la primera consulta de Traumatología el 26 de enero de este año. El traumatólogo le mandó una resonancia, que se la hicieron en abril, pero desde entonces espera una nueva consulta con este especialista para conocer los resultados y tener un diagnóstico. En todo este tiempo la paciente, que ha presentado varias reclamaciones en el hospital, se ve obligada a tomar medicación debido al dolor.
El Sindicato Médico sostiene que al igual que en Traumatología, es muy preocupante la lista de espera en Cirugía Ortopédica Infantil al no haber especialista asignado a dicha especialidad tras la jubilación hace un año del facultativo que atendía dicha patología. «Son muchos los déficits de la asistencia en el hospital y también es especialmente llamativo el retraso en las revisiones de cardiología infantil pediátrica, que llega incluso a los 15 meses y lo recomendable es a los tres».
El sindicato profesional atribuye toda esta situación a la «mala gestión de los servicios sanitarios por parte de la dirección-gerencia» y asegura que está provocando también situaciones de conflicto e incluso violentas en la relación médico-enfermo, con un incremento de las agresiones.
Desde el Sindicato Médico anima a todos los profesionales a denunciar por escrito las deficiencias que afecten a la calidad de la asistencia y también pide a usuarios y familiares que sean comprensivos con el personal, «porque a pesar de ese déficit de recursos los médicos hacen todo lo posible para cumplir su labor de la mejor manera posible». Considera además importante que los propios usuarios presenten también reclamaciones por los déficits que se están produciendo en el hospital.
Fuente: Diario de Jerez