Carta de unos médicos de Atención Primaria a su director de Unidad de Gestión Clínica.
Esta carta que reproducimos y que nos han enviado unos médicos de Atención Primaria se podría extrapolar a muchos médicos de Primaria. Es tan escaso el tiempo que disponen los médicos en AP y que el SAS lo obvia, que lo debemos dar a conocer.
A/A Dirección UGC Coria del Río.
Los abajo firmantes, Profesionales Médicos de la ZBS de Coria del Rio, quieren expresar por este escrito su total rechazo y desacuerdo con las medidas tomadas por la Dirección de la Unidad de Gestión Clínica (UGC), a instancias de la Dirección del Distrito Norte-Aljarafe, sobre la demora en las consultas de nuestra UGC.
Por ello desean expresar que las demoras generadas en las consultas son motivadas por la no sustitución de los profesionales en las ausencias por licencias reglamentarias o bajas por enfermedad, y no por los profesionales (se adjuntan ejemplos de consultas cerradas y no sustituidas en los últimos dos meses), que atienden a TODOS los usuarios que figuran en las agendas diarias.
Consideramos, por tanto, que la gestión de la atención, no puede estar basada en el cierre de consultas y agendas, que es obvio que sobrecarga el resto de las consultas, sometiendo a los profesionales a un ejercicio profesional que, además de producir una situación continuada de estrés, afecta seriamente a la calidad asistencial al tener muy limitado el tiempo de atención al paciente.
Los médicos somos los únicos responsables de la buena praxis en la atención a TODOS Y CADA UNO de nuestros pacientes, por lo que los tiempos de asistencia por usuario de que disponemos (5 minutos e incluso menos en casos no demorables y repartos de agendas), y el alargar el horario en las agendas, no sirve más que para empeorar el ya exiguo tiempo por consulta que tenemos para ejercer una atención médica adecuada, “ambulatorizar” la atención, hacer imposible la realización de otras tareas necesarias y aumentar el estado de tensión e inquietud que padecemos permanentemente por el cansancio psicofísico que supone ver, cada día, un inasumible número de pacientes (mínimo de citas de 52 actualmente y que, finalmente, suelen sobrepasar los 60).
Rechazamos estas medidas que anteponen el cumplimiento de objetivos por parte del SAS a la atención al paciente y exigimos que se dediquen los medios necesarios para que todas las ausencias sean sustituidas y no haya ni una sola consulta ni agenda cerrada.
Rechazamos igualmente las medidas impositivas, sin previo aviso (interrumpiendo incluso consultas para dar instrucciones), sin debate con los profesionales, sin analizar las causas ni poner soluciones a las que provocan la demora y que ya han sido descritas, siendo ellas responsabilidad de la Administración y no de los profesionales, que ejercen su labor con toda la presión de una sobrecarga de trabajo que impide una atención de calidad y aumenta el riesgo de error.
Como dicho dialogo y análisis no ha existido, con este escrito exigimos que se repongan las agendas a la situación anterior, ya de por sí enormemente sobrecargadas como decimos desde hace años, y que se sustituyan todas las ausencias por licencias reglamentarias e IT.
No podemos asumir, con garantías de una aceptable condición de trabajo, más de un enfermo cada 10 minutos de media, ni la prolongación por más de 4 horas de la asistencia a demanda diaria, que nos permita poder realizar otras tareas tan necesarias como obligatorias para nosotros, como profesionales, y para el sistema ante sus usuarios.
Firman 22 médicos.
Coria del Río, marzo de 2016.