A pesar de que la administración manifestó en la pasada mesa sectorial que todos los contratos se renovarían al 100% y por bolsa (con la única excepción de aquellos que entraron con una oferta específica en cuyas bases constaba que era para un año, renovable hasta cinco), nos llegan noticias de centros que hacen pensar en la posibilidad de que se repita una situación como la ocurrida en febrero: Una vez más el SAS deja en manos de los gerentes la contratación, permitiendo situaciones injustas, discriminatorias e irregulares.

Mucho nos tememos que otra vez se van a usar distintas “varas de medir” para permitir que los todopoderosos directivos decidan quién a a renovar y quién ha de quedarse fuera, sin más criterios que su opinión hábilmente disfrazada de necesidad asistencial.

Ya nos consta que en algunos casos pretenden renovar solo por un mes a algunos de los facultativos recién incorporados como eventuales. El motivo no sería otro que evitar que esos contratos salgan a bolsa para “blindar” a los que están y posteriormente preparar “perfiles” que le den oficialidad y regularicen la situación.

El SMA no quiere ser cómplice de estas situaciones, nuestro apoyo en mesa sectorial era claro: “Queremos que todos pasen al 100% y que las renovaciones se lleven a cabo según la legislación vigente y respetando los principios de Igualdad, Mérito y Capacidad”.

Todo lo demás es cosa del SAS (triquiñuelas “alegales”, justificaciones rocambolescas, sutiles métodos para disfrazar de objetividad un capricho,…) y suya será la responsabilidad de organizar un caos con decenas de víctimas y daños colaterales. Al fin y al cabo no es la primera vez que con su actitud nos demuestran que les importan poco los profesionales y que mantener la potestad de decidir quién trabaja y quién no, es para ellos la mejor forma de asegurarse la sumisión de cuantos temen perder su puesto de trabajo.

Si el SAS decide repetir sus errores NO va a hacerlo con nuestro consentimiento. El SMA está absolutamente en contra de cualquier forma discriminatoria de contratación.

Hemos intentado durante meses llegar a un acuerdo con el SAS, hemos hecho propuestas concretas, hemos forzado reuniones y todo ha sido en vano. Ni una sola de nuestras sugerencias ha sido tenida en cuenta.

Pero ustedes, directivos del SAS, no están en perpetua posesión de la verdad, el futuro laboral de centenares de facultativos altamente cualificados no puede estar en manos de nadie, debe hacerse por métodos objetivos y objetivables.

Pero claro, qué se puede esperar de una Institución que exige acreditación de competencias a todos excepto a sus directivos, que coloca al frente de miles de profesionales a personas sin experiencia alguna en gestión y que premia con magníficas puntuaciones en el CRP a aquellos mandos intermedios que más explotan y desmoralizan a sus facultativos..

En fin, mucho nos tememos que se va a reproducir la situación de febrero de 2015. Las prisas preelectorales no son buenas y desde luego nosotros NO vamos a ser partícipes de esta precipitación por conseguir unos cuantos votos, venga de quien venga.