Hace unas semanas ya publicamos un artículo en el que mostrábamos nuestra preocupación por el rumbo que parecen tomar la sanidad pública española y la andaluza. Para nuestra organización es evidente (y el tiempo nos dará la razón) que, si no se toman medidas urgentes y de calado, estamos abocados a una sanidad pública poco accesible, de menor calidad y con importantes demoras; una sanidad pública que estará orientada a aquellos grupos sociales que no pueden pagarse una póliza de salud privada.

Pero dejemos a un lado las opiniones y los presagios y centrémonos en los datos que nos permiten hacernos una idea de cuál es el estado de la Sanidad Andaluza. 

Según los datos extraídos de la página web oficial del SAS (que tiene publicada la plantilla de los últimos años), el número de Médicos ha pasado de 16.826 en 2019 (no se contabilizan los médicos en formación) a 19.024 en 2022. Este crecimiento supone un aumento porcentual del 13,06% que resulta claramente insuficiente si tenemos en cuenta el crecimiento del total de la plantilla del SAS ha sido del 19,11% o que otras categorías como enfermería han crecido un 27,45%. Cabría resaltar asimismo que el mayor aumento de personal que se llevó a cabo del 2020 al 2021 como consecuencia de la pandemia supuso un aumento global del 23,21% y un aumento en enfermería del 33,22% mientras el número de médicos solo aumentó un 5,03%. Es decir, estos números reflejan claramente la tendencia hacia un modelo sanitario en el que cada vez será más difícil el acceso al médico. 

Estos datos, sin embargo, podrían no tener mucho significado per se en un contexto en el que la sanidad funcionara de manera óptima y el grado de satisfacción de los ciudadanos se mantuviera en niveles altos; pero si buscamos ahora en los indicadores oficiales que el Ministerio de Sanidad elabora (el año 2020 es el último del que hay datos), veremos que la realidad no es esta.

Andalucía continúa teniendo la cifra más baja de España en cuanto a FEAs/1000 hab. La media española se sitúa en 2,02 mientras que en nuestra comunidad no pasamos de 1,51. Además, de estos FEAs solo el 88.6% trabaja para el sistema público, es decir 1,33 FEAs/1000 Hab mientras que en la media española el porcentaje que trabaja para la sanidad pública se sitúa en el 92,18% (1,86 FEAs/1000 Hab). Estamos también por debajo de la media nacional si nos referimos a los Médicos de Familia en Atención Primaria por cada 1000 habitantes: en Andalucía 0,75 y la media nacional está en 0,78.

Sobre la demora para ser atendido por el Médico de Familia en A.P. no se publican datos, pero sí existen registros sobre la demora para consulta de especialidades; tampoco salimos bien parados: La demora media nacional se sitúa en 77,23 días mientras que en Andalucía estamos en 106,49 días.

Otro dato significativo lo encontramos al analizar la frecuentación en consultas: la frecuentación en consulta ya sea pública o privada se ha mantenido (o elevado ligeramente) en los últimos años, pero si reparamos en la frecuentación exclusivamente en consultas públicas veremos que en la última década ha venido disminuyendo tanto en el territorio nacional como en Andalucía. Esto traduce claramente la tendencia de la población (la que tiene recursos, claro) a contratar pólizas de salud privadas.

El resultado de esto empieza a ser la pérdida de confianza de los ciudadanos en el sistema sanitario público; de hecho, los últimos datos reflejan la disminución en los índices de satisfacción. Según esta misma fuente (Ministerio de Sanidad) en Andalucía el índice de satisfacción se sitúa en 6,4 y en el resto del territorio nacional en 6,7. 

En fin, si bien es cierto que en los últimos años se ha aumentado considerablemente el presupuesto dedicado a sanidad en Andalucía, resulta evidente que es necesario mantener ese esfuerzo financiero. Andalucía necesita aumentar el número de facultativos en la Sanidad Pública y mejorando la inversión en este ámbito porque “la salud de nuestro sistema sanitario” sigue necesitando un tratamiento efectivo si queremos conseguir una mejora significativa. 

Desde nuestra organización seguiremos empujando para que así sea y seguimos contando con vuestro apoyo para que nuestra voz se oiga y nuestros dirigentes sean conscientes de las necesidades de la población y de los profesionales que mantenemos este sistema del que tan orgullosos nos hemos sentido siempre.

Comité Ejecutivo SMA