El Sindicato Médico de Cádiz solicita medidas por la desprotección ante las agresiones.
El Sindicato Médico solicita a la administración que tome medidas ante las agresiones a los profesionales sanitarios. Propone que haya botones antipánico en las consultas o que se instalen cámaras de seguridad.
El Sindicato Médico solicita a la administración que tome medidas ante las agresiones a los profesionales sanitarios. Después de la agresión que sufrió un facultativo del centro de salud de Poniente, en La Línea, el sindicato se concentró a las puertas de este ambulatorio para demandar que el protocolo que el Servicio Andaluz de Salud activa ante este tipo de situaciones no se limite a que haya un guardia de seguridad, sino que también se colocan botones antipánico o que se instalen cámaras de seguridad para observar y responder de forma inmediata a este tipo de conductas.
José Perea, delegado del Sindicato Médico en el Campo de Gibraltar, considera que hay otras formas para prevenir las agresiones. «No solo hay que poner un guardia de seguridad cuando pasa, sino que hay que hacer un estudio. En todos las consultas debe haber timbres antipánico que toquen los médicos y que alguien responda, o poner circuitos de seguridad que recojan cuáles son las personas que han agredido o que estén a punto de agredir y que alguien esté vigilando de forma permanente. Lo que no se puede hacer es poner un parche cada vez que hay una agresión».
El representante sindical explicó que ese botón de pánico no está activado en todos los centros de salud, «bien porque están averiados o porque en el diseño del centro de salud en cuestión no estaban previstos». El hecho de que las agresiones a los profesionales sanitarios esté considerado como un delito a un agente de la autoridad, en opinión de Perea, ha servido como medida disuasoria. «En los juzgados, al menos en esta zona, las denuncias se tienen en cuenta y se ponen sanciones. Por lo menos es otro método disuasorio para las personas que pretenden agredir a un médico».
Juan Benjumeda, también delegado del Sindicato Médico, aboga porque se conciencie a la población ante este tipo de sucesos. «Las agresiones van en perjuicio de los ciudadanos porque los médicos y otro personal, como de enfermería y no sanitario, rechazan ir a los centros en los que este tipo de sucesos son más frecuentes», alertó.
El representante sindical ofrece otras medidas. «En las consultas habría que hacer reformas con el fin de que haya dos puertas para que el médico pueda escapar en caso de que haya una agresión. A la administración también hay que pedir que tome medidas ante los agresores y que no haya que esperar a una sentencia. Cuanto menos que se le pueda cambiar de centro o de cupo por la vía administrativa y que no haya que esperar una sentencia, que tarda bastante. Que se vea que el que protagoniza incidentes de este tipo tenga dificultades para acceder a ese centro».
«Nos sentimos desprotegidos porque las agresiones se dan con frecuencia y las sanciones por vía penal tardan en llegar y el mismo día de sufrir la agresión, por la tarde, pueden volver a ver al individuo, como ya ha ocurrido», lamentó Benjumeda.
Fuente: Diario de Jerez