El SMA valora positivamente las declaraciones de Aguirre y se muestra partidario de un examen extraordinario del MIR.
Los facultativos, que también solicitan la desburocratización de la sanidad, avisan de que defenderán sus atribuciones y no permitirán intrusismo.
El Sindicato Médico Andaluz (SMA) ha valorado positivamente las declaraciones del nuevo consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, el popular Jesús Aguilar, al coincidir plenamente en que “aquel que sale de la facultad, automáticamente debería entrar en la vía MIR”. Para el SMA, la propuesta de un examen extraordinario del MIR, que permita el acceso a la especialidad de miles de licenciados, “es una de las demandas históricas del colectivo ya que, de otra forma, los recién licenciados no podrían ejercer la medicina pública en España”.
“Es una propuesta que responde a nuestras pretensiones”, han dicho desde el sindicato médico que explican que es una buena herramienta para formar a todos los licenciados españoles y ofrecerles trabajo en la sanidad pública, en lugar de fomentar la importación de facultativos y permitir la contratación de médicos no especialistas y, por tanto, no habilitados”.
Por otro lado, el SMA considera como un aspecto fundamental la intención del consejero de desburocratizar la atención sanitaria. “Desde hace años nuestra organización viene demandando tiempo para la atención al paciente. Este problema, que en los últimos años ha llegado aser acuciante en atención primaria, afecta en general a todos los ámbitos asistenciales”, ha explicado el sindicato. Según han subrayado, “hoy en día el facultativo andaluz pasa más tiempo rellenando formularios, pasando interminables pantallas de ordenador, llamando a sus pacientes a consulta o realizando tareas más cercanas a los cuidados de enfermería o a las labores de auxiliar que historiando y explorando a un paciente”.
“Siempre hemos defendido que la burocratización es una de las formas más claras de ineficiencia pues supone emplear una gran parte del tiempo del personal altamente cualificado en la realización de tareas auxiliares o de menor nivel de cualificación”.
No obstante, han indicado, “defenderemos, eso sí, nuestras atribuciones y no permitiremos intrusismos; estaremos vigilantes para que la desburocratización no acabe convirtiéndose en una invasión de competencias”, han dicho los facultativos quienes añaden que “defendemos la asistencia de calidad y esto solo puede traducirse en que existan profesionales muy bien formados en su ámbito y que ejerzan las funciones que le son propias con responsabilidad y rigor”. “No se debe de perder eficiencia realizando tareas de colectivos menos especializados ni se puede perder calidad asumiendo tareas de colectivos más cualificados”.
Por último, creemos que “priorizar la inversión en sanidad, fortalecer la atención primaria, mejorar los contratos para evitar la fuga de batas blancas, conseguir la equiparación salarial y humanizar la sanidad, son objetivos que cualquier profesional comparte y espera”.