“El Plan de Humanización del Sistema Sanitario Público de Andalucía tiene como objetivo Impulsar las Estrategias de Humanización en el SSPA que respeten la dignidad de las personas y sus derechos, que incorporen lo que tiene valor para el paciente y unas condiciones de trabajo adecuadas para sus profesionales. El Hospital Universitario Virgen de las Nieves comparte los elementos esenciales de este Plan que son accesibilidad, personalización, compromiso con la calidad, corresponsabilidad y la cultura de humanización.”

Este párrafo aparece en la página web del HUVN cómo introducción de la Estrategia de Humanización del sistema sanitario que el SAS ha incluido como uno de los pilares de la estrategia de la Consejería de Salud. Es loable este esfuerzo en implementar medidas que hagan que la atención sanitaria que reciben los usuarios del SAS sea respetuosa con la dignidad de las personas y sus derechos.

En rojo quedan remarcados los elementos esenciales, que no incluyen lo resaltado en negrita “unas condiciones de trabajo adecuadas para sus profesionales”.

¿Al excluir ese elemento de lo considerado esencial por el SAS, el HUVN viene a confirmar que la humanización no es aplicable en el trato al profesional?

Esto puede parecer un olvido, pero analizando la situación que sufren las profesionales facultativas del HUVN que tienen concedida una reducción por guarda legal de su jornada de trabajo, deja claro que ante la falta de recursos económicos o de capacidad para gestionar esos recursos, la Administración ha optado por considerar las reducciones de jornada por guarda legal cómo un serio problema en la gestión de personal y, por tanto, va a desarrollar estrategias que haga que las profesionales opten por renunciar a esos derechos de conciliación o bien sean menos costosas para el hospital.

El motivo de esta situación es la negativa de los Servicios centrales del SAS a cubrir todas las reducciones de jornada de las facultativas, aceptando solo un porcentaje escaso que es del 33% de las solicitadas, lo que supone que 2 de cada 3 contrataciones no se realizan.

Ante esta situación, se vienen tomando medidas desde hace tiempo (no es un tema nuevo, lo arrastramos desde hace años, pero actualmente más frecuente por el aumento de las solicitudes de reducción de jornada y sumarse a esas solicitudes algunos varones).

Dentro de estas medidas se incluyen:

• Modificación de las condiciones de disfrute de la reducción, previamente aceptadas, imponiendo la nueva condición sin capacidad para negociar.

• Contabilidad de las jornadas de trabajo de manera irregular y discriminatoria. Lo confirma una sentencia del Tribunal Constitucional: 91/2020 de 20 de Julio que recoge en el fallo:

“Declarar que se ha vulnerado el derecho de la recurrente a la igualdad ante la ley y la prohibición de discriminación indirecta por razón de sexo (art. 14 CE)”.

Esta sentencia es seguida de otras sentencias en Tribunales de Andalucía.

• Esta contabilidad discriminatoria se utiliza para reclamar “defectos de jornada” a final de año que en realidad son excesos de jornada, siendo este 2023 un año en el que se ha extendido de forma generalizada afectando a la gran mayoría de las facultativas con reducción de jornada. Se les permite “generosamente” devolver ese supuesto defecto de jornada en turnos extra (recordamos que no hay contratación de facultativos en Navidades ni para sustituciones de IT ni Reducciones de Jornada) o bien en dinero (así “mejoran” algo su presupuesto).

• Para implementar esta estrategia, se están celebrando reuniones en los Servicios o bien se cita individualmente a las afectadas.

En las reuniones se expresa que las facultativas “no cumplen correctamente su jornada” y deben horas a la administración. Esto genera una sensación de malestar y de intimidación, que se aproxima al maltrato profesional al generar sensación de incumplimiento y más beneficio personal frente sus compañeros.

En las reuniones individuales se les conmina a devolver esas jornadas que la administración ha calculado de forma discriminatoria. Todo esto, por supuesto, con buenas palabras y buscando el “beneficio del profesional”, pero sin opción a discrepar. O se acepta o se ejecuta el cobro de cantidades.

Por todo esto:

• Denunciamos la actitud de la Administración que, ante la falta de capacidad para la gestión económica y del personal, se vale de actitudes discriminatorias que afectan a la conciliación familiar.

• Denunciamos la falta de humanidad con estas profesionales.

• Reclamamos, una vez más, que la contabilidad de jornada se realice de una forma no discriminatoria (rechazada pese a múltiples solicitudes) sin necesidad de esperar la Sentencia en los Tribunales para obtener una respuesta que ya ha dado el Tribunal Constitucional.

• Exigimos que cesen las medidas coercitivas y discriminatorias ya comentadas.

Sabemos la respuesta de la Administración, pero no podemos permanecer callados esperando las resoluciones judiciales que terminen con este atropello y trato deshumanizado que reciben nuestras compañeras.

COMITÉ EJECUTIVO SINDICATO MÉDICO DE GRANADA