Se buscan 300 médicos… o más.
Los periódicos escritos y digitales informan de la falta de médicos en Andalucía y de la necesidad que tenemos en distintas zonas. Esperamos que se tomen medidas importantes para paliar este déficit.
En Andalucía hay 92 zonas básicas de salud consideradas de «difícil cobertura» sanitaria por falta de facultativos. Se trata de algo menos de la mitad de las 216 comarcas sanitarias del Servicio Andaluz de Salud. En muchos casos son áreas rurales distantes de las capitales de provincia o de difícil acceso, zonas de sierra, etc. Pero no siempre. Grandes municipios como Almonte o Ayamonte en Huelva o Úbeda, en Jaén, se incluyen en el listado de destinos poco apetecibles para el personal sanitario.
Frente a la bucólica imagen del médico vocacional que cuida de un pueblo puerta a puerta, la realidad demuestra que es preciso incentivar a los facultativos para que opten por estos destinos. Las condiciones de vida y de trabajo, el riesgo a la inmovilidad laboral por mucho tiempo, la lejanía a los centros hospitalarios, las dificultades para acceder a la investigación y a la formación continuada y a los medios que las posibilitan, entre otros aspectos, hacen a estos destinos menos atractivos para el especialista en Medicina Familiar de Atención Primaria y pediatras.
En muchos casos los médicos destinados en estas zonas marcadas aluden directa o indirectamente a la soledad como el principal problema.
Ni la mejora de la comunicaciones y los medios de transporte, ni las infinitas posibilidades que abre la era digital han logrado reducir de momento el número de zonas de difícil cobertura, más al contrario, se incrementa. En su última actualización el pasado 1 de febrero, la Consejería de Salud incorporó 29 nuevas zonas de «difícil cobertura». El origen del problema es la falta de facultativos.
En este sentido, Salud ha solicitado la convocatoria de un examen MIR especial restringido a especialistas en Medicina Familiar al que puedan acceder los más de 5.000 licenciados que no ha conseguido plaza de especialista en la última convocatoria. Con eso se pretende paliar la falta de médicos y los problemas que acarrearán futuras jubilaciones masivas. Se calcula que en esas zonas marcadas hay un déficit de 300 facultativos de Atención Primaria.
Los anteriores gestores del SAS se plantearon, ante la falta de médicos, realizar convocatorias extraordinarias específicas dirigidas a facultativos extracomunitarios con el incentivo de asegurarles de partida varios años de residencia en España.
Ahora se buscan otras alternativas. Las distintas comunidades están citadas el próximo 18 de marzo para buscar fórmulas que eviten la «fuga de batas blancas» entre las distintas regiones en pleno déficit de especialistas. El Parlamento andaluz, a instancias del PP, aprobó esta semana una iniciativa para que el Consejo de Gobierno elabore y apruebe un Plan de Retorno de Profesionales Sanitarios que se centrará en mejorar las condiciones laborales y realizar contratos de larga duración, entre otras medidas.
No basta con tener médicos dispuestos a trabajar. Los nuevos gestores del sistema sanitario público anuncian asimismo un plan especial para incentivar estos destinos de «difícil cobertura». Fuentes de la consejería admiten que el primer paso debe ser incentivar en nómina el destino, ofrecer garantías de movilidad en el futuro mediante la convocatoria de ofertas públicas de empleo bianuales que fomenten esa movilidad.
Asimismo, se debe potenciar la telemedicina y mejorar los accesos a medios diagnósticos asociados a nuevas tecnologías, así como el acceso del profesional a medios de formación telemática. Se incentivará la investigación sociosanitaria y epidemiológica en zonas rurales, además de mejorar la coordinación con los centros de especialidades y hospitales. Por último, Salud admite que debe asumir el reto de garantizar la cobertura inmediata de bajas de los profesionales sanitarios destinados a estas zonas de salud de difícil cobertura.
Fuente: ABC Sevilla