Si los médicos trabajaran a turnos en vez de hacer guardias de 24 horas, harían falta 50.000 profesionales más.
Para que los médicos puedan a trabajar a turnos como las enfermeras en los hospitales habría que aumentar las plantillas en 50.000 facultativos más.
Aumentar las plantillas en 50.000 médicos. Esa es la estimación que el secretario general de la Confederación Estatal Sindicato Médicos (CESM), Francisco Miralles, ve necesaria para que el actual sistema sanitario español pase de una jornada de facultativos con guardias de 24 horas a un sistema de turnos como el que tiene actualmente Enfermería en un hospital.
Tras múltiples estudios que aquejan lo perjudicial de estas guardias y la denuncia de los profesionales por la sobrecarga de trabajo que suponen, Miralles ha asegurado que esta es una propuesta perseguida por el sindicato aunque “utópica”. Con la actual situación de las plantillas “y una falta latente de profesionales”, el secretario general prefiere no “pedir de más” y centrar su lucha en que las plantillas de sanitarios sean las oportunas para la asistencia hospitalaria.
«El proyecto de eliminar las guardias de 24 horas -ratifica-, sería más que favorable para el médico pues le igualaría en derechos con otras profesiones que trabajan a turnos». Hay que recordar que compañeros como las enfermeras no tienen este sistema de jornadas de 24 horas y tienen, en el caso de trabajar en hospitales, turnos de 12 horas.
De hecho, Miralles asegura que para poder implantar una jornada laboral igual que la de sus compañeros de Enfermería haría falta incrementar las plantillas de médicos en un 60 por ciento. “Sabemos que sería lo ideal y nos igualaría la jornada con cualquier otro trabajador del sistema sanitario. Sería un auténtico lujo”, argumenta.
Pero, y ya que considera el modelo de turnos médicos “improbable”, Miralles mira más a corto plazo y lanza otra petición al Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social: cubrir las plazas de profesionales que, con el actual sistema, «hacen falta en el sistema de salud».
Miralles considera que una de las medidas iniciales para poder solventar el déficit de profesionales es crear plazas para todos esos estudiantes de Medicina que, año tras año, intentan acceder al examen de Médico Interno Residente (MIR) y se quedan fuera por falta de plazas. El secretario general de CESM estima que hay unos 15.000 futuros profesionales en esta situación que podrían estar trabajando «ya» en el Sistema Nacional de Salud (SNS). “Como mínimo”, finaliza.
Fuente: Redacción Médica