Un 34% de los médicos ha barajado durante la pandemia la idea de dejar la profesión.
El estrés pasa factura a los profesionales entre quienes un 20% adelantaría la jubilación si pudiera, según datos del estudio ‘Repercusiones de la covid-19 sobre la salud y el ejercicio de la profesión de los médicos de España’. Y tú, como te sientes?
La pandemia ha impactado de forma clara en la salud física y mental de los médicos españoles, por encima del resto de la población, hasta el punto de que un 25% de estos profesionales ha estado de baja por motivos relacionados con la covid-19 y un 33% tiene problemas para conciliar el sueño, por citar solo algunos datos. La consecuencia de la sobrecarga y el estrés afrontados por el colectivo médico se traduce en que un 34% ha llegado a barajar la idea de dejar la profesión y un 20% de adelantar la jubilación.
Estos son algunos de los datos contenidos en un estudio sobre Repercusiones de la covid-19 sobre la salud y el ejercicio de la profesión de los médicos de España, realizado por la Fundación Galatea, la Organización Médica Colegial (OMC), el Colegio de Médicos de Barcelona y Mutual Médica y las profesoras Núria Mas, de IESE Business School y Judit Vall, del Institut d’Economia de Barcelona (IEB-UB). La encuesta ha contado con la participación de 4.515 médicos españoles.
A pesar de que tras la primera ola los datos de prevalencia de malestar y deterioro físico, mental y emocional de los médicos han mejorado ligeramente la situación dista aún de alcanzar los niveles prepandemia.
Para la realización del informe se ha analizado la situación en tres momentos diferentes, en concreto antes de la pandemia, durante la primera ola, es decir, entre marzo y abril y en el último trimestre de 2020.
Además de estar de baja un 25,5% por motivos relacionados con la covid, un 2% han estado hospitalizados y un 8% ha vivido la muerte de algún compañero de trabajo por esta causa.
Además, un 80% ha tenido algún compañero de baja, lo que a la preocupación derivada de esta situación hay que sumar el incremento en la carga de trabajo que los profesionales han tenido que asumir por enfermedad de parte de su equipo.
Con respecto a la calidad del sueño, el estudio refleja que un 27% de los encuestados duerme menos y peor, en concreto, menos de 6 horas, mientras que antes de la pandemia en esta situación se encontraban el 14%. En cuanto a problemas para conciliar el sueño o mantenerlo en esta situación se encontraban el 9% al inicio de la pandemia, dato que se disparó al 45% durante la primera ola y se redujo después al 33%.
Respecto a la autopercepción sobre su salud, llama la atención que un 23% considere que es mala o regular, frente al 6,9% que decían sentirse así antes de la pandemia, lo que supone un aumento de más del triple, según ha destacado Luis A. Morales, presidente de Mutual Medica.
Otro dato significativo es el de los que presentan síndrome de burnout, es decir, un estrés que se cronifica y cursa en forma de hartazgo y agotamiento. En esa situación se encuentran 6 de cada 10 médicos.
Y con este dato se relaciona el del incremento en el consumo de tranquilizantes e hipnóticos, que ha pasado del 18,6% al 29,4%. Antoni Calvo, director de la Fundación Galatea, ha llamado la atención sobre este dato y ha resaltado que a las mujeres de la profesión les cuesta menos pedir ayuda cuando la necesitan que a los hombres.
Un 16% de los médicos están recibiendo atención o apoyo desde los servicios de Salud Mental y un 13% dice que acudirán a este tipo de servicio porque reconocen necesitar ayuda, dato que en el caso de la comunidad de Madrid es significativamente mayor que en el resto de comunidades. Que la atención en salud mental se dispense preservando el anonimato es una cuestión que los profesionales encuestados reflejan como prioritaria.
Así, otras de las principales conclusiones que se desprende del estudio es que, a pesar de llevar más de un año inmersos en la pandemia, todavía son pocos los médicos que acuden a servicios de apoyo a la salud mental para hacer frente al malestar emocional y al agotamiento mental acumulados.
Entre los usuarios de servicios de salud mental, los programas más utilizados son los que ofrece la Fundación Galatea, tanto preventivos como asistenciales (son los preferidos por el 33% de los usuarios); seguidos de los servicios de apoyo que se están prestando desde los propios centros de trabajo y de los ofrecidos en los centros de atención primaria. Desde el inicio de la pandemia, Fundación Galatea ofrece, con la colaboración de Fundación La Caixa, un servicio de Teleapoyo Psicológico que hasta el momento ha atendido a 1.300 profesionales de la salud de toda España y ha efectuado más de 4.400 intervenciones.
Un indicador que refleja el estado de energía de los médicos es la cifra de quienes afirmaron después de la primera ola sentirse sobrepasados y menos preparado para afrontar las que podrían venir a continuación, situación que confesaron el 51% de los encuestados.
Más preparados y en mejor situación dijeron sentirse el 23,8%. “Se da la circunstancia de que cuanto más peso directivo en su función tenía el médico mejor preparado para una nueva ola decía estar y cuanto menos directivo, parece que peor lo ha pasado y más dificultades ha tenido”, ha destacado Morales.
Y otro dato significativo es el de haber tenido que enfrentar dilemas éticos en la atención a los pacientes durante este periodo, situación en la que se han encontrado el 61% de los médicos, según este trabajo.
En concreto, un 33,2% ha dicho haberse encontrado en esta situación durante la pandemia “a menudo o muy a menudo” y un 39,2% “a veces”. Así, llama la atención que solo la cuarta parte de los médicos no hayan tenido que enfrentarse a problemas éticos en la atención a los pacientes. Se ha visto que contar con equipos fuertes y protocolos de actuación sobre qué hacer ayudaba a llevar mejor la situación cuando se dan estos dilemas, según los responsables de la investigación.
Como elemento positivo, la cohesión y el trabajo y apoyo de equipo han sido algunos de los factores que más han ayudado a los profesionales a sobrellevar la situación.
Así, los profesionales se han sentido masivamente apoyados por sus compañeros y equipos en los peores momentos de la crisis (83%) y también por los pacientes (82%). Sin embargo, solo uno de cada tres médicos ha percibido el apoyo de su organización y de los gerentes y directivos de sus centros de trabajo.
Para Tomás Cobo, presidente de la Organización Médica Colegial, es muy llamativo que un tercio de la profesión haya barajado la idea de dejar la profesión aunque luego finalmente no lo vaya a hacer. Según la encuesta, un 3,9 respondió que sí a la pregunta de si se ha planteado dejar la profesión, un 30,2 ha respondido que sí aunque finalmente no la dejaría mientras que un 65,9% no se ha planteado en ningún caso abandonar la medicina.
Estos datos ponen de relieve, según Cobo, “el tremendo esfuerzo realizado por la profesión y la necesidad de cuidar al que cuida desde todas las instancias posibles”
Fuente: Diario Médico