Un médico de Málaga acaba con ocho costillas rotas tras una paliza de los familiares de un paciente.
Las agresiones a médicos vuelven a incrementarse. El SMM denuncia la brutal paliza a un facultativo y a un enfermero del Hospital Regional de Málaga, por la que han sido detenidas dos personas, familiares de un paciente ingresado en el centro hospitalario
Ocho costillas rotas y múltiples contusiones. Así acabó un médico del Hospital Regional de Málaga el pasado fin de semana tras recibir una brutal paliza de dos familiares de un paciente ingresado en el centro sanitario.
La agresión tuvo lugar cuando el facultativo salió en defensa de un compañero enfermero que estaba siendo insultado por los agresores. Le acorralaron en su consulta, donde fue agredido a golpes. La paliza provocó la rotura de ocho costillas, además de numerosos desperfectos en el mobiliario del Hospital.
El servicio de seguridad alertó rápidamente a la Policía Nacional, que detuvo a los autores de la agresión, y fueron denunciados en el Juzgado de Guardia. Ahora se encuentran a disposición judicial acusados de atentado, según ha informado este jueves el Sindicato Médico de Málaga (SMM).
Esta mañana los médicos se han concentrado a las puertas del Hospital Regional para denunciar este último caso de violencia hacia el personal sanitario y desde el sindicato han vuelto a denunciar el incremento de las agresiones.
En un comunicado han instado a la Administración a «tomar medidas más contundentes ante estos hechos cada vez más asentados y extendidos en los centros sanitarios de la provincia y en Andalucía», y han asegurado que continuarán denunciando estos casos de violencia «tanto de forma pública como en los juzgados».
Critican que después de tantos meses de pandemia y cuando la mayoría de la población entiende y respeta las normas para prevenir el virus, la falta de conciencia se mantenga «entre energúmenos que no respetan a los demás».
En este sentido, desde el sindicato piden que la Justicia «actúe con mayor firmeza con estos salvajes» y han llamado a la sociedad a cumplir con unas medidas que han demostrado disminuir «el riesgo de contagio y muerte».